Estados Unidos negó hoy que el Gobierno del presidente Donald Trump llegara al punto el año pasado de planear una invasión militar de Venezuela, pero reconoció que la opción sigue sobre la mesa como una de muchas posibles herramientas para “ayudar al pueblo” venezolano a “recuperar la democracia”.
“No hubo una invasión planeada”, dijo a Efe un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca (NSC, en inglés), el órgano encargado de centralizar la política exterior, militar y de inteligencia de Washington.
La fuente subrayó, no obstante, que Estados Unidos seguirá considerando “todas las opciones que tiene disponibles”, incluida la vía castrense, “para ayudar a que el pueblo de Venezuela recupere la democracia, la estabilidad y la prosperidad”.
VÍA LA PATILLA.