Varios grupos de venezolanos bloquearon hoy calles y avenidas de Caracas en protesta por las recurrentes fallas en el suministro de agua y por la crisis del transporte público que afecta al país, al tiempo que advirtieron con nuevas manifestaciones si no se restablecen con prontitud estos servicios.
Vecinos de la comunidad La Candelaria y San Bernardino, en el oeste de la capital venezolana, denunciaron que en algunos sectores de estas zonas el agua no llega desde hace dos meses y cerraron por tres horas vías del centro de la capital venezolana, sede de los poderes públicos.
“Nosotros exigimos el restablecimiento del agua o si no vamos a seguir protestando”, dijo a Efe el líder vecinal Carlos Julio Rojas.
Rojas señaló que un representante de la estatal Hidrológica de la Región Capital (Hidrocapital, adscrita al recién creado Ministerio de Atención de las Aguas) se reunió con los manifestantes y “solo ofreció excusas”.
“No es posible que ministros se bañen en piscinas y estén disfrutando mientras que los ciudadanos no tenemos ni un poquito de agua para cocinar, no somos camellos, queremos agua”, añadió.
En tanto que en Baruta (este) otro grupo de ciudadanos cortó calles y esparció obstáculos en la vía para exigir un suministro regular de agua y un mejor servicio de transporte público.
Hidrocapital informó el domingo que “tras la ejecución de labores correctivas” el servicio de agua potable en Baruta y el municipio Libertador de Caracas se normalizaría de forma “progresiva” de acuerdo con el “plan de abastecimiento” en marcha.
Además de estas protestas, los caraqueños demandaron este lunes un mejor y más económico servicio de transporte público.
En Chacaito (este) cortaron calles por el aumento del pasaje urbano, que se ubica entre 15.000 (0,13 o 0,0068 dólares según la tasa de cambio que se use) y 20.000 (0,17 o 0,0090 dólares) bolívares.
Estas protestas se suman a las que han venido desarrollando desde la semana pasada los gremios de enfermeros y docentes universitarios del país, quienes reclaman mejoras salariales y de condiciones de trabajo.
Venezuela, el país con las mayores reservas de petróleo en el planeta, padece una severa crisis económica que se traduce en escasez de casi todo e hiperinflación, lo que hace aún más difícil el acceso a la cada vez menor oferta de productos.
El mes pasado un gremio de transportistas de Caracas, el Comando Intergremial de Transporte, dijo a Efe que al menos el 90 % de las 300.000 unidades que cubrían las diversas rutas del país están en “paro técnico” debido a los elevados costos de algunos repuestos y a la falta de otros.
El Gobierno venezolano respondió con la creación de varias líneas de transporte y el uso de camiones de carga para movilizar pasajeros, que en el país se conocen como “perreras”.
VÍA LA PATILLA.