Los elevados precios de las tarifas y la escasez de efectivo han llevado a que algunos conductores se abstengan de usar los estacionamientos privados. “Están demasiados caros. La tarifa estándar está entre 10.000 y 20.000 bolívares diarios. Así que ahora opto por parar el carro en la calle, lo que antes no hacía por la inseguridad”, dijo una conductora.
El impacto para los comercios ha sido fuerte. Claudia Itriago, directora de la Cámara Venezolana de Centros Comerciales, afirmó que la afluencia de vehículos ha caído 40% por la falta de efectivo. “Este es un servicio que se ofrece a los visitantes, pero hay muchos que prefieren no usar al estacionamiento”, dijo.
Ante la falta de efectivo muchos estacionamientos están aplicando alternativas de pago. Un ejemplo es el centro comercial de El Marques. Tiene una tarifa plana de 10.000 bolívares y no cuenta con punto de venta. Sin embargo, para reducir las pérdidas permite transferencias bancarias.
“Aceptamos transferencias desde teléfonos móviles. Incluso, permitimos que los clientes usen nuestra computadora para realizar el pago desde cualquier banco”, dijo la encargada del estacionamiento. Advirtió que es más trabajo al momento de contabilizar, pero es una opción ante la escasez de efectivo.
En un estacionamiento de la misma zona, la tarifa por 5 horas es 6.000 bolívares desde hace 20 días, si se requieren horas extras cobran 3.000 bolívares por cada una. “Antes lo teníamos lleno, ahora bajó la cantidad de vehículos. La falta de efectivo afecta al negocio y el tema de las transferencias es complejo si son de otro banco no caen al momento”, contó el administrador.
En un centro comercial del este la tarifa es de 20.000 bolívares desde hace 15 días y disponen de punto de venta. “Las tarifas suben con cada aumento salarial, porque de alguna manera se necesita cubrir gastos”, señaló un trabajador.
Un estacionamiento en Chacao cobra 2.000 bolívares la hora desde principios de mes. El encargado relató: “La tarifa no da para cubrir todos los gastos, debemos pagar servicios, comprar talonarios, cancelar nómina y eso se ve afectado por la baja de clientes”.
Indicó que no tener punto de venta es una desventaja porque los clientes prefieren parar en las adyacencias del lugar a donde van, antes que pagar los precios.
“El dueño del estacionamiento se negaba a buscar alternativas de pago, así que muchos clientes dejamos de utilizar el servicio al no poder contar con 10.000 bolívares diarios. La medida de presión lo hizo cambiar de parecer: a comienzos de marzo comenzó a ofrecer un talonario de 20 tickets, que cuesta 220.000 bolívares y se paga mediante transferencia”, dijo la usuaria de un estacionamiento en La Trinidad.