La salud en Carabobo no solo está en riesgo por falta de medicinas e insumos. El déficit de especialistas promete ser cada vez mayor como consecuencia de los sueldos precarios que reciben. Solo en 2017, cuatro mil médicos renunciaron a sus cargos para irse del país a otras latitudes donde cobran más de 41600% de lo que reciben de manera incompleta desde el ministerio.
Romni Villasmil, presidente de la Sociedad de Médicos Internistas y Residentes (Somir) de la Ciudad Hospitalaria Enrique Tejera (CHET) de Valencia, detalló que de acuerdo al la contratación colectiva del sector que entró en vigencia el 1 de enero el salario básico de un doctor es de dos millones 400 mil bolívares, que equivale a un poco más de 12 dólares, mientras que en Chile y Perú les pagan hasta cinco mil dólares al mes a un médico venezolano.
Al deficitario ingreso que perciben más de 70 mil profesionales en el país, de los que 12 mil corresponden a Carabobo, se suman las irregularidades en los pagos. Este año le cambiaron de forma repentina la fecha de las quincenas que serán los 5 y 25 de cada mes, y no recibieron el depósito con el aumento correspondiente. Tampoco cuentan con seguro funerario ni médico.
Villasmil pidió a las autoridades del Ejecutivo que se solvente esta situación para que no suceda como en 2017, cuando pasaron seis meses sin cobrar sus salarios. “Muchos de estos profesionales están residenciados, o tienen familia y necesitan su sueldo aunque sea poco”.
En la CHET, el centro hospitalario más grande de Carabobo que recibe a pacientes de estados vecinos como Cojedes y Yaracuy, las deficiencias persisten. En quirófano solo uno de cuatro ascensores funcionan y es el mismo donde bajan la basura y desechos biológicos y suben a los enfermos; además, hay muchas áreas sin aire acondicionado y continúa la falta en 80% de medicinas como antihipertensivos y anticonvulsivantes. “Aunque debemos reconocer que con el cambio de gobernador han mejorado algunas cosas. Ya no se le pide el kit quirúrgico a los pacientes, se están remodelando varias zonas y mejoró la dotación de antibióticos”.