Durante todo el año 2017 las autoridades policiales recibieron formalmente en sus dependencias solo 310 denuncias de secuestros en todo el país, según revela el estudio de incidencia delictiva en Venezuela, hecho por el Observatorio Venezolano de la Seguridad (OVS), ente adscrito al Ministerio de Interior, Justicia y Paz.
Aunque la cifra revela que hubo una disminución en este delito, pues en todo el año 2016 se reportaron 458 casos en el territorio nacional, esto no demuestra que efectivamente haya mermado el accionar de las bandas de secuestradores.
Lo que sí deja claro, como lo refieren expertos en materia de seguridad, es que cada día los familiares de las víctimas prefieren no denunciar por varios elementos: uno, que vayan a matar al secuestrado y dos, porque no confían en las autoridades.
Lo cierto es que uno de los casos que terminó con el asesinato de las víctimas, fue el secuestro y homicidio del sobrino de la diseñadora de modas Carolina Herrera y de su socio, Reinaldo Herrera y Fabrizio Mendoza respectivamente, ocurrido la mañana del 11 de mayo de 2017 en La Tahona, municipio Baruta de estado Miranda.
Ambos jóvenes empresarios fueron sometidos por hampones, quienes se apoderaron de pertenencias y luego los mataron de tiros en la cabeza. Posteriormente abandonaron los cadáveres en la carretera Caracas-La Guiara dentro de la camioneta de Fabrizio ese mismo día en horas de la tarde.
Familiares de ambos denunciaron en la sede del Cicpc y se inició la investigación, pero al conseguir los cuerpos los funcionarios se dedicaron a tratar de capturar a los responsables.
Luego de un mes de pesquisas, lograron apresar a cuatro sujetos implicados en el hecho, quienes hoy confesaron su participación.
Para atacar el secuestro, el ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, anunció el 28 de septiembre pasado la puesta en marcha del Plan Antisecuestro en todo el país, destacando que las cinco entidades con mayor incidencia eran: Distrito Capital, Miranda, Aragua, Carabobo y Zulia.
Explicó en su momento que un grupo especial de funcionarios estaría desplegado y recibiría capacitación para atender cada una de las aristas de este flagelo, dándole importancia a los familiares de las víctimas.
Este plan estaría respaldado por un sistema automatizado de información, donde los funcionarios encargados de cada caso serían los únicos en poder acceder para realizar las investigaciones.
De eso no se ha hablado más y los casos, sobre todo de secuestros exprés, continúan ocurriendo.
El estado Miranda ha sido una de las regiones de mayor incidencia delictiva por años, ya que tiene zonas donde se concentran las bandas criminales como Valles del Tuy y Barlovento, y además es el borde económico del Área Metropolitana de Caracas con los municipios Sucre, Chacao, Baruta y El Hatillo.
En relación con Guarenas y Guatire, ciudades conexas a la capital (también del estado Miranda), sucede algo particular, pues su ubicación permite a los delincuentes usarla como guarida o vía de escape.
Una víctima de secuestro fue el estudiante universitario, Yonaiker José Rojas, de 19 años, quien fue plagiado el 10 de septiembre en Guarenas, al momento en que andaba con su padre.
Tres días después fue liberado y rescatado por efectivos de la Policía Nacional Bolivariana, quienes recibieron la denuncia del hecho.
El joven fue golpeado, le cortaron el cabello y sufrió terror psicológico por parte de los maleantes.
Estos casos se repiten a diario en el país, destaca el criminólogo Fermin Mármol García.
Como negociador en estos hechos, el experto ha insistido siempre en la necesidad de la población de resguardarse y tomar medidas de seguridad desde el hogar.
De acuerdo con los estudios que ha hecho, Mármol García refiere que los secuestros exprés siguen liderando la lista de los delitos asociados al plagio, pues no se denuncian y se cometen en zonas donde se concentra el capital como Altamira, Los Palos Grandes, Alta Prado y La Lagunita, sectores de los municipios Chacao, Baruta y El Hatillo.
Las cifras el OVS también demuestran que las horas de mayor incidencia para este delito son las nocturnas, es decir, entre las seis de la tarde y las seis de la mañana.
Los “cazadores” de personas se distribuyen en vehículos de alta gama para pasearse por sectores de la capital y así captar a sus víctimas.
Una zona que ha sido difícil de atacar y erradicar las bandas criminales dedicadas al Secuestro, es la Cota 905. En los últimos dos años más de 40 sujetos han sido ultimados en distintos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad cuando ingresan a desmantelar bandas y a rescatar víctimas.
En viviendas abandonadas en esos barrios de la parte alta han encontrado grandes sumas de dinero en moneda nacional y extranjera producto de las negociaciones ilícitas para liberar secuestrados.
Dos de los delincuentes que forman parte de los 10 más buscados del país y que hacen vida en esa zona caraqueña son: “el Coqui” y “el Vampi”.
Ambos sujetos trabajan juntos y lideran varias organizaciones dedicadas al secuestro que, incluso, se han ido expandiendo por el país.
A pesar de las cifras (sean muchos o pocos los casos conocidos), las autoridades insisten en la necesidad de denunciar los casos de secuestro que vayan ocurriendo. “Hay que ganar confianza en las instituciones y hay que trabajar juntos para atacar este flagelo que deja secuelas en la población, estamos obligados a ganarle la guerra a los delincuentes”, dijo Reverol cuando lanzó el plan Antisecuestro.
A tomar en cuenta
- Las autoridades recomiendan no exhibir objetos de valor ni presumir bienes.
- Estar atento en horas de la noche cuando circula por sectores específicos de la ciudad.
- Denunciar cualquier hecho irregular, así no haya sido víctima sino testigo directo.
- Usar con responsabilidad las redes sociales y no difundir fotos de lugares que frecuenta.
- Aportar datos de crimínales a los policías de forma anónima que permitan ayudar con su captura.