El presidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal, aseguró que es decisión de cada empresa si acepta o no el subsidio del Gobierno nacional por 90 días para pagar el salario mínimo a sus trabajadores.
En la entrevista durante el programa #ConLaLuz de este miércoles 22 de agosto, con la periodista y directora de Efecto Cocuyo Luz Mely Reyes, el dirigente gremial afirmó que aceptarlo dependerá de la capacidad de cada organización, si puede asumir o no el ajuste de sueldos, que pasará de 3 millones de bolívares fuertes a 180 millones de bolívares fuertes o 1.800 bolívares soberanos desde el primero de septiembre.
“Esa es una decisión que tiene que tomar cada quien, si eres una empresa que no tiene el flujo de caja y necesitas el periodo para adaptarte y necesitas el apoyo, aprovecha el apoyo mientras vas nivelando”, sugirió Larrazábal.
También citó el caso de las empresas que tienen productos regulados y no los dejarán reconocer el aumento de los costos, entonces no tendrán el flujo de caja necesario esos 90 días, por lo que también requiere del subsidio. “No veo nada malo que las empresas lo adopten“, manifestó.
Larrázabal aseguró que no debe haber temor de entregar las nóminas de las empresas al Ejecutivo nacional, porque las empresas ya vacían mensualmente su carga laboral en el sistema Tiuna del Seguro Social (Ivss); el Seniat conoce esa nómina, también el Inces y otras instituciones a las que debe reportar el empresariado formal en el país.
Sin embargo, consideró que no es tan sencillo como lo dice el presidente Nicolás Maduro de entregar los datos, porque no se trata como dijo el mandatario de aportar los datos en un pendrive, sino a través de un mecanismo más complejo, en el caso de los que no lo han hecho.
Larrázabal destacó el papel de los empresarios en el país y recordó que en las giras que realizan por el país para encuentros con las cámaras afiliadas a Fedecámaras, se encuentran con una “situación bipolar“, porque por un lado se escuchan las quejas y cómo hacen los dueños de comercios, empresas y demás negocios para sobrevivir, y por el otro de cómo están innovandoy creando procesos para mantenerse a flote en medio de esta crisis.
“La gente no baja la guardia, ese es el venezolano que está a lo largo y ancho del país, el que está produciendo los alimentos, el que está sembrando, lo ves en toda Venezuela. Cuando este país agarre los vientos de cambio que en algún momento se tendrán que dar, nos vamos a recuperar muchísimo más rápido que la gente cree”, subrayó.
No somos un partido político
Larrázabal también se refirió a la convocatoria a paro que hicieron tres partidos políticos de la oposición para este martes 21 de agosto, y la decisión de la agrupación empresarial no de avalar este llamado de Primero Justicia, Voluntad Popular y La Causa R.
“Los reclamos tienen que venir de la sociedad, Fedecámaras no es un partido político, no puede sustituir el rol de los líderes políticos y sociales para que ellos puedan manejar los reclamos legítimos de los venezolanos, (por esoen cuanto al paro) dimos libertad a los empresarios. Lasociedad civil es la que tiene múltiples razones para reclamar porque además es un derecho constitucional“, sostuvo.
Y como dijo el lunes, mantuvo que el martes era una fecha inapropiada porque las empresas se encontraban ante una indefinición -que aún se mantiene- porque no se sabe cómo facturar, valorar sus productos y todavía “hay una gran incertidumbre“.
No funcionarán cambios
Acerca de los planes económicos, reconoció que a pesar del cambio del léxico gubernamental en reconocer el déficit fiscal y su responsabilidad en la generación de dinero inorgánico, los cuales disparan la hiperinflación, por otro lado mantienen la aprobación de bonos y tiene “el populismo en su ADN“, lo que a su juicio hace inviable que se apliquen esos cambios.
También cuestionó que mientras se habla de un nuevo sistema cambiario, se quiera llenar con la oferta de particulares y empresas privadas, que tienen pocas divisas.
“En cuentagotas se nos dice desde ayer (martes) que se va a manejar con el Dicom, de la misma manera que era antes pero ahora con tres subastas. El Dicom previo no funcionaba para nada porque no tenía ninguna oferta. Todo este programa de ajustes para que funcione tiene que tener un a fuente de financiamiento establecida”, que actualmente no tiene el país como se hizo en otras naciones como Brasil y Perú, donde se vivieron procesos hiperinflacionarios.
Vía Efecto Cocuyo