En los últimos diez años, los desplazamientos desde El Salvador, Guatemala y Honduras se han multiplicado casi por 50, y aumentaron de 18.400 personas al final del 2011 a unas 867.800 al final del 2020. A nivel global, el 12% de todas las nuevas solicitudes de asilo presentadas en 2020 provenía de personas ciudadanas de estos tres países

 

El 12% de todas las nuevas solicitudes de asilo presentadas en el 2020 a nivel global fueron de personas provenientes de El Salvador, Guatemala y Honduras, evidenciando el aumento de los desplazamientos forzados en el región, según un informe de la agencia de la ONU para los refugiados, ACNUR.

 

En total, casi 900.000 personas se vieron obligadas a salir de sus hogares en los países del llamado Triángulo Norte y medio millón de ellas fueron desplazadas internacionalmente en el 2021, de acuerdo con ACNUR.

 

 

 

De las 549.200 personas desplazadas internacionalmente de estos tres países, el 79% se encontraba en Estados Unidos, seguido por México, con un 14%.

 

Los factores económicos, politicos, sociales y climáticos, combinados con “la violencia crónica de las pandillas, las violaciones a derechos humanos y la inseguridad alimentaria”, son los motivos que provocaron los desplazamientos, creando un “éxodo constante de individuos, familias y niños no acompañados”, estipula el informe de ACNUR.

 

El reporte, que muestra las tendencias en los desplazamientos forzados a nivel mundial, estima que en el 2020 82,4 millones personas en todo el mundo fueron desplazadas por la fuerza y un 86% de ellas fueron acogidas en países en desarrollo.

 

 

 

Colombia ocupa el segundo lugar como país en vías de desarrollo con el mayor número de refugiados a nivel mundial, con más de 1.7 millones de personas venezolanas desplazadas. Venezuela es el según país que más ciudadanos ha expulsado, con más de 5 millones de personas refugiadas y desplazadas a nivel mundial, representando la segunda mayor crisis de desplazamiento externos del mundo, superado únicamente por Siria.

 

La pandemia de COVID-19 exacerbó los riesgos y muchos venezolanos desplazados perdieron sus trabajos y no pudieron conseguir comida ni refugio, estipula el organism de la ONU.

 

“Al enfrentarse al desalojo, la explotación y el abuso, con un acceso limitado o nulo a la atención médica o la protección social, alrededor de 130.000 no vieron otra opción que regresar cuando golpeó la pandemia, pero un número creciente de personas se fue de nuevo a medida que se relajaban las restricciones de movimiento”, según en informe de ACNUR.

 

La cantidad de personas refugiadas y venezolanas desplazadas en el extranjero en las el continente americano creció un 8% durante 2020, con Brasi, México y Perú siendo los principales destinos.

 

Entre las mayores situaciones de PDI a nivel mundial, Colombia siguió reportando el número más alto de personas desplazadas internas, con 8,3 millones a finales de 2020

 

Colombia, por su parte, sigue reportando la cifra más alta de desplazamiento interno a nivel mundial, con 8.3 millones de personas desplazadas para finales del 2020. Las restricciones relacionadas con el COVID-19, junto con el control de grupos armados irregulars limitó el acceso humanitario y el avance en soluciones para los desplazados internos, aseguró la ONU.

 

Alejandro Ramírez Saavedra

CEO

NOTIEXPRESSCOLOR . COM

Loading...