Kevin Álvarez rescató lo que parecía sería una tarde de eventos desafortunados para la selección mexicana de futbol.
De prácticamente último minuto Álvarez envió el balón a las redes del arquero camerunés Fabrice Ondoa para firmar el 2-2 en partido amistoso celebrado ante poco más de 30 mil personas en el estadio Snapdragon de San Diego.
El empate también salva el invicto del director técnico Diego Cocca, quién tomó las riendas de la selección mexicana en febrero pasado. El juego ante Camerún fue el último ensayo para México previo a la semifinal de la Liga de Naciones de la Concacaf (el próximo jueves) y posteriormente, la Copa Oro.
La tarde empezó con malas noticias para México. El portero Carlos Acevedo, quién se había anunciado iniciaría como titular, sufrió una lesión en el hombro durante los ejercicios de calentamiento. Su lugar lo tomó el arquero Ángel Malagón.
Por Camerún, anotaron Bryan Mbeumo al minuto 37, y Karl Ekambi al 61. El segundo tanto camerunés fue producto de un grave error del arquero Malagón que por poco le cuesta el partido a México.
Por el tricolor ambos tantos llegaron en tiempo de compensación. Israel Reyes al 47 en el primer tiempo, y posteriormente, el héroe del encuentro para el tricolor, Kevin Álvarez en el 90, cuyo gol a pase de Henry Martín desató el júbilo de la afición.
“(El partido) nos demuestra que todavía tenemos que corregir y mejorar muchas cosas. Los dos goles de ellos fueron errores nuestros”, reconoció Cocca. “Pero también la actitud del equipo me ha gustado”.
México enfrentó a un Camerún en cuyo equipo destacaban algunos jugadores que estuvieron en el conjunto que el año pasado jugó la Copa del Mundo. En dicho certamen, los cameruneses vencieron 1-0 a Brasil, aunque no calificaron a la siguiente ronda.
Los jugadores no se fueron satisfechos con el empate. “No estamos del todo contentos con eso porque creo que teníamos la capacidad para ganar el partido”, dijo el defensa Gilberto Sepúlveda.
Sepúlveda consideró que el equipo está mejorando y adaptándose a la manera de juego del técnico. “Yo creo que es cuestión de tiempo para que el equipo se vea mucho mejor”, agregó.
En medio de muchas dudas el próximo jueves México enfrentará a Estados Unidos.
Para dicho encuentro, algunos de los jugadores que estuvieron este sábado en San Diego no estarán, entre ellos, Álvarez. Sin embargo, llegarán aquellos que militan en las ligas europeas.
El primero en incorporarse fue Guillermo Ochoa, quién hoy pudo calentar con el equipo de porteros en la cancha del Snapdragon pese a no estar convocado.
Una vez que terminó el calentamiento, Ochoa se acercó a la afición que esperaba en la primera fila para firmar autógrafos y tomarse fotografías. Lo mismo hizo el portero Antonio Rodríguez.
El delantero Henry Martin, quién es el actual campeón de goleo en la liga mexicana, subrayó que desean ganar el clásico ante Estados Unidos de la próxima semana. “Este clásico se vive a full. Queremos ponernos por encima de los rivales siempre”.
La afición mexicana respondió, y si bien no fue un lleno total en el estadio, el ambiente se mantuvo en todo momento en las gradas.
“(Estamos) contentos con la gente. Muy metida, siempre apoyándonos, hasta el último momento”, dijo Sepúlveda. “Estamos agradecidos con ellos”.
La última vez que México jugó en San Diego fue en marzo de 2019 en el demolido estadio SDCCU. En aquella ocasión, el tricolor derrotó 3-1 a Chile en un partido que fungió como debut del entonces técnico Gerardo Tata Martino.
“Hacía falta que regresaran”, dijo Alfredo Medina, residente de San Diego y seguidor de la Selección Mexicana. “Recuerdo cuando veníamos a Qualcomm, lo llenábamos y se podía sentir la energía”.
Fuente: Union Tribune