Los fanáticos de Marruecos celebraron en Qatar junto con los jugadores cuando el equipo se convirtió en la primera nación africana en llegar a una semifinal de la Copa del Mundo después de una victoria por 1-0 sobre Portugal.
La derrota de Portugal ante Marruecos probablemente puso fin a la búsqueda de Cristiano Ronaldo por una victoria en la Copa del Mundo.
El jugador de 37 años, a quien se le vio llorando tras la contundente derrota, comenzó el partido en el banquillo y no pudo igualar el partido en la segunda mitad.
Si, como se esperaba, esta fue su última aparición en el escenario más grande del fútbol mundial, culmina una carrera como una de las principales atracciones del deporte en el juego internacional. Una fuerza física imponente, los fanáticos observaron durante dos décadas cómo el delantero se abrió camino a través de las defensas, trabajando duro y entrenando hasta que fue simplemente mejor que nadie en el campo.
Fuente: CNN