El presidente de Colombia, Gustavo Petro, está promoviendo una reforma a la salud en su país que, a juicio de las senadoras opositoras Paloma Valencia y María Fernanda Cabal, podría ser “la puerta de entrada” a “médicos esclavos cubanos” o la implantación del “modelo venezolano” en esa nación sudamericana.
Según el Ministerio de Salud de Colombia, la iniciativa aprobada en el primero de cuatro debates reglamentarios en el Congreso “permitirá a todos los colombianos tener un modelo sanitario con infraestructura de calidad, trabajadores del sector con buenas condiciones salariales y pacientes con cuidados integrales”.
Sin embargo, la senadora Valencia advirtió que para la puesta en marcha de la reforma “en algún momento” se tendría que recurrir a más médicos y, de tal manera, no descarta la posibilidad de que se pida a Cuba el envío de galenos que solo perciben alrededor del 15% por sus servicios, mientras que el resto del pago se destina a las arcas de la dictadura para financiar la represión en contra de la población.
Entretanto, la legisladora Cabal dijo creer que la reforma propuesta por Petro podría conducir a la “destrucción” del que considera uno de los “mejores” sistemas sanitarios del mundo, como ocurrió en su momento en Venezuela, en donde hoy los hospitales y centros médicos funcionan con serias deficiencias.
Reparos
La senadora del Centro Democrático Paloma Valencia también basa sus apreciaciones en la “semejanza” con el “modelo de Venezuela”, para después asociarlo con Cuba, por cuanto la reforma planteada por Petro daría especial énfasis a la salud preventiva.
En ese sentido, el mandatario colombiano ha propuesto la creación de los Centros de Atención Primaria, aprobados en el primer debate de la nueva norma, que operarían por áreas de 25.000 habitantes, con “médicos itinerantes que visiten de manera permanente a las familias de las regiones”.
Según Valencia, la reforma “podrá tener alguna semejanza con el modelo de Venezuela, porque empezaría con el tema de la salud preventiva, pues no tenemos el número de personas que se necesitan para esos equipos de visitadores”.
A lo que agregó: “Ahí es donde empezaron [en Venezuela] con la importación de los médicos cubanos y posteriormente a eso los médicos cubanos empezaron a recetarles a los ciudadanos venezolanos las drogas hechas en Cuba”. Con eso, de acuerdo con la legisladora, “lograron no solamente financiar la dictadura, sino quebrar toda la industria productora de medicamentos venezolanos y los venezolanos terminaron financiando el régimen cubano, sin medicamentos y con pésima calidad de la salud”.
En su visita a La Habana en febrero, la vicepresidenta colombiana, Francia Márquez, afirmó en una entrevista en la televisión oficialista del régimen que “estamos proponiendo una reforma a la salud, donde la salud vuelva a ser administrada por el Estado; claro, esto no va a ser muy fácil”.
Además, dijo que el gobierno estaba buscando “quitarle el negocio a la élite, a los sectores privados que volvieron la salud una mercancía, y no un derecho fundamental, como lo es la salud preventiva, como lo es aquí [en Cuba] que han tenido como un eje central y que es parte de lo que queremos hacer en Colombia”.
Y sumó: “Yo creo que la experiencia que ustedes han tenido en términos de sistemas de salud y lograr que en Cuba se formen a los mejores médicos del mundo es parte de la experiencia y del camino que necesitamos en Colombia”.
Al respecto, la senadora Valencia apuntilló que “ese modelo fracasado ya se conoce” y que “en Colombia hay que evitar que eso vaya a suceder”.
“Es una vergüenza”
El modelo de atención preventiva, a través de centros de atención primaria, en cuyo contexto se inscriben ciudadanos para ser atendidos por médicos de barrio es una idea que implantó Hugo Chávez en Venezuela en el año 2003, y que luego copió Petro cuando se desempeñó como alcalde de Bogotá.
En el caso de Venezuela, estos centros ambulatorios estaban cerrados en más de un 80%, según cifras del año 2022. En cuanto a la capital colombiana, el sistema implementado por quien gobierna el país en estos momentos generó sobrecostos, corrupción, una alta tasa de congestión y un servicio que algunas organizaciones califican de muy deficiente.
La también senadora María Fernanda Cabal, después de comparar la reforma con lo que se implantó en Venezuela, sostuvo que es “una vergüenza, esa sí ‘histórica’, que de esta manera hayan logrado votar el 50% de la reforma a la salud, que acaba con uno de los mejores sistemas de la región”.
“Venezuela también pasó por una reforma a la salud que destruyó el sistema”, sentenció.
Cabal se refirió a uno de los puntos del proyecto que fue aprobado, la transformación de las EPS en una nueva figura llamada “gestoras de vida”, lo que para la legisladora tiene el significado de “estatización” del sistema de salud colombiano.
Durante el debate de la reforma, el ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, en contraposición de la vicepresidenta Márquez, expresó que no se estaba copiando el modelo de ningún país, y específicamente se refirió a Cuba, al tiempo que negó categóricamente que se busque la “estatización” del sistema sanitario.
Es “un triunfo de la gente, de la gente de a pie”, señaló el titular de la cartera de Salud en un espacio informativo de la presidencia colombiana.
La reforma
El presidente Petro celebró el primer paso alcanzado por su reforma en el Congreso. A través de Twitter, el mandatario felicitó a los congresistas que votaron favorablemente a la propuesta.
Los legisladores aprobaron algunas facultades extraordinarias al jefe de Estado, entre las que resalta una relacionada a las EPS, Entidades Promotoras de Salud, que pasarán a convertirse en Empresas Gestoras de Salud.
Las EPS son entidades privadas responsables de la afiliación, el registro y la atención de los afiliados al sistema de salud. También recaudan dinero de las cotizaciones y su función es “organizar y garantizar la prestación del plan obligatorio de salud”. El gobierno ha aseverado que muchas EPS son “insolventes” y tienen un “alto déficit financiero”.
Asimismo, la Adres, Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud, se transformará en el único pagador de los servicios de salud, por lo que manejará al año millonarios recursos que serán centralizados y manejados a discreción presidencial.
La Adres administra los recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud, es decir todo el dinero que entra tanto del Estado mediante impuestos, como de los parafiscales, que son los aportes de salud de personas y empresas, y recursos del que se denomina Sistema General de Participaciones.
De 139 artículos presentados, fueron aprobados 117. Ahora, el proyecto será debatido en la Cámara de Representantes y una vez sea aprobado eventualmente en segunda discusión pasaría al Senado.
Funente: EFE