Por Gervis Medina Ochoa
En estos tiempos aciagos, y los hechos sucedidos en mi otro país. ¡Colombia! mi abuela materna nació en la ciudad de Medellín, demás familiares en la costa y los otros en la ciudad de Cali; de la cual históricamente me unen lazos grandes de amistad y hermandad. Cuando se propuso el proyecto de reforma tributaria, la estudié y difería en algunos puntos. ¡Pero de allí a pensar que no es necesaria una reforma al sistema tributario es mear fuera del perol!
Como es bien sabido, el tema de la pandemia ha afectado a la mayoría de los países del continente latinoamericano, países que lejos de poseer una economía saludable y serios conflictos políticos, están invadidos de la plaga del socialismo del siglo XXI; esta maldita enfermedad del alma, que ha azotado más que la propia pandemia, puesto a que le han hecho creer a sus enfermos, que en esta vida todo es gratis y que el dinero cae del cielo como el maná.
Este zurdismo latinoamericano, llena la cabeza a los incautos (pendejos) de que tienen derecho a todo lo que exista en la tierra, creación del hombre y de la naturaleza; pues no es así. ¡Zurdos de mierda, la educación, la salud, la internet, el gas, el transporte, etcétera, son bienes materiales que se comercializan, y alguien tiene que pagarlos! ¿saben por qué? ¡porque alguien los produce! Esta enfermedad del alma, ha hecho creer a este lado del continente que hasta la internet (invento de los gringos) es un derecho fundamental y de paso es gratis. ¡Que bolas!
La sede principal de los Zurdos del continente, es decir la OEA y ONU, han redactado un catálogo extenso de derechos sociales, que supera los catálogos de AVON y TUPERWARE; catalogo este de derechos del hombre, y han confundido a mucha gente que son derechos inalienables, son tan numerosos estos derechos materiales, que no caben en las constituciones de los países tercer zurdistas; por cierto, derechos que nunca cumplen los gobiernos que enferman el alma a la gente y engañan con populismo y promesas de papel.
¿La reforma tributaria es necesaria? ¡Pues! para responder a esta pregunta, lean bien lo que les escribo. ¡Partiendo de la lógica de existencia del Estado como un leviatán! Que tiene un grado de intervención de más del 70%, pues claro que es necesaria, ¿acaso el dinero cae del cielo? Acaso el pacto social que existe en los países que exceden las funciones de Estado, ¿sacan el dinero de dónde? pues del bolsillo de las personas, a través de algo que se llama impuesto. ¿Cómo estas sociedades llenas del concepto “todo regalado” deben financiar el gasto público? Fácil, a través del pago de su bolsillo, es decir, ¡El Estado te mete la mano en el bolsillo para satisfacer tus necesidades y la de ellos también!
Debido a la pandemia los ingresos del país disminuyeron y el gasto social se disparó, debido a que el sistema de salud colapsó para atender los infectados del letal virus, por otro lado, el costo de cada vacuna oscila entre los 20 y 30$, saquen sus cuentas al multiplicar ese monto por la cantidad de habitantes dos veces, es decir unos 2,5 mil millones de dólares americanos, por otro lado, el gasto público corriente se mantiene, sueldos, bonos, subvenciones, subsidios, electricidad, gas, agua entre otros gastos que posee el leviatán.
¡Ah! pero es que, en esta crisis continental, piensan poseer los mismos privilegios sin pagar ni medio peso.
Es justo que la gente pague los impuestos, basados en la lógica de gobierno que se diseñaron, hay que equilibrar el presupuesto para programas de apoyos y subsidios que se tienen que extender, para que las personas puedan alimentarse, tener salud, educación entre otros en tiempos de pandemia.
Déjenme decirles que la izquierda recalcitrante, estaba esperando una excusa para desestabilizar el gobierno y este tema fue perfecto, para levantar la bandera del vandalismo y convertirse en una sociedad deletérea y criminógena, recordándome la película “The Purge” violando todas las normativas de propiedad privada, propiedad pública, destrozando supermercados, bancos, centros de salud y los autobuses y estaciones del sistema de transporte MIO. La pregunta seria es, ¿fue espontaneo todo esto? ¿La gasolina cayo de los cielos, para prender fuego a los establecimientos incendiados?
Todo esto estaba perfectamente planeado y los que creían que estaban marchando por el no a la reforma, cayeron por incautos, solo eran tontos útiles de estos desadaptados que sabían lo que querían.
Reconozco que, desde el inicio del siglo XXI, Colombia superó el tema social invirtiendo en el gasto social, eliminando el terrorismo, disminución del tema de la Coca, generando empleos, en algunos indicadores económicos positivos. Lo que no tolero es que vándalos perfectamente organizados, hagan apología del desastre en nombre de la libertad a manifestar. Cayendo en el tema burdo de los ricos y los pobres, desconociendo que si acaban con el aparato productivo privado no habrá persona jurídica a la cual aplicar los impuestos. ¿Son bobos, estúpidos o qué? ¿Si o qué?
Muy decepcionado de la actuación de mis hermanos colombianos que actuaron de esta forma, se pasaron a la acera de la criminalidad, eso no lo tolero, condeno esa conducta criminógena y deletérea, no habéis aprendido de nuestra experiencia, Venezuela un país con mas de 30 millones de habitantes con todas las riquezas juntas en nuestras tierras, y por un empeño de unos malnacidos gobernantes y otros alcahuetes (oposición) acabaron con el sector privado, para estatizar todo, con el cuento de la “Justicia Social” y la redistribución de las riquezas, acabar con toda una nación. ¡No basta!
¿Qué queréis? ¿Un país de mierda? ¿Un país dividido nuevamente? No es lo mismo invocar al diablo, que verlo llegar. Te lo digo como experiencia, lo vivido en mi país debe servirle de experiencia, no pidan socialismo ni nada que se le parezca, los exhorto para entender de estos temas políticos y económicos, así desarrollar un programa de alfabetización económica y así eliminar los sofismas construidos. Dile no al socialismo carajo!! Sé libre y sonríe en defensa propia!!
Gervis Medina
Abogado – Criminólogo – Escritor
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