Marea Socialista, que expresa abiertamente su respaldo a la revolución, si bien condenó el atentado también cuestionó que pasadas las 24 horas del hecho no se hayan mostrado con detalles las evidencias. Exigieron una investigación independiente, profesional y participativa y que se informe verazmente a la ciudadanía.
Lo mismo pidieron Héctor Navarro, ex ministro de las carteras de Educación y Energía; Gabriela Ramírez, ex defensora del pueblo, y Nicmer Evans, vocero del Movimiento por la Democracia e Inclusión. Consideraron que, en caso de que la tesis del gobierno sea falsa, la investigación dejaría al descubierto que se trató de un “show mediático” para desviar la atención de la colectividad.
Sin embargo, ven poco probable que se lleve a cabo una averiguación independiente debido a que desconfían de las instituciones del Estado por tener poca credibilidad. “Tendría que haber una investigación exhaustiva e imparcial, pero eso parece difícil”, dijo Navarro.
«Lo más deseable es que haya una investigación independiente, pero eso no ocurrirá. Las evidencias están bajo la autoridad de funcionarios capaces de tergiversarlas para ajustar sus conclusiones a la versión oficial», apuntó Ramírez.
Voceros del chavismo disidente también pusieron en tela de juicio la versión oficial. “El gobierno no tiene arraigo popular y lo que le queda ahora es activar todo su aparato comunicacional. Buscan fabricar un mito para hacerle creer a la gente que Maduro es un ser invencible que sobrevivió un atentado. Y uno se pregunta quién puede estar interesado en atentar contra la vida de Maduro. Tratan de utilizar ese evento como un factor de movilización ante el paro de enfermeras y el paro nacional planificado por todos los sectores”, añadió Ramírez. Descartó que el ataque haya sido planificado por sectores de la oposición. Los partidos que adversan al gobierno no tienen la capacidad humana ni económica para llevar a cabo un plan de tal magnitud, señaló.
Navarro afirmó que si hubiese sido planificado por Estados Unidos o Colombia, como asegura el gobierno, “no lo hubiesen pelado”.
Evans indicó que, en ese caso, el plan del gobierno fracasó. La magnitud de la falta de credibilidad de Maduro es tan alta en la población que, incluso en las bases del chavismo, no generó ninguna muestra de solidaridad. “Esperaron hasta el lunes para convocar una movilización y forzar a los empleados públicos a llenar una cuadra”.
En un comunicado publicado en Aporrea, Marea Socialista advirtió que los ataques y planes contra el presidente pueden ser aprovechados «para imponer más sacrificios al pueblo venezolano, como los que pudieran desencadenarse con las medidas económicas previstas por el gobierno a partir del 20 de agosto, para cuya dura aplicación el Ejecutivo necesita imponer un control social más férreo y recortar todavía más los derechos democráticos para evitar toda resistencia popular”.
Navarro apuntó que detrás de la denuncia de Maduro pudiera estar la intención de justificar la represión y crear ambiente de opinión para centrar la atención de la colectividad en el supuesto plan de magnicidio y no en la crisis económica y social.
Dudan del plan. La fiscal general Luisa Ortega Díaz rechazó las acusaciones en su contra. En Twitter respondió los señalamientos que hicieron el canciller Jorge Arreaza y Maduro. “Mi lucha contra la tiranía es solo con las armas que me da la ley. Ellos saben bien que cuando planifico las cosas, las hago bien. Si yo estuviera detrás de ese plan, el país estaría celebrando su libertad. Basta de mentiras”, escribió.
Vía El Nacional.