La avenida Yare, en la zona O, adyacente al parque con el mismo nombre, permanece solitaria en horas de la tarde. Transeúntes pasan en grupo y con rapidez por las calles que están frente a un terreno baldío donde se puede notar un camino allanado que se adentra entre la vegetación. “Por esta zona asaltan a mucha gente”, dijo uno de los vecinos que caminaba por la avenida, mientras un vehículo rompía el silencio del sector donde asaltan entre dos y tres veces al día, según residentes de la urbanización.
Carmen Bejar, presidente de la Asociación de Vecinos de Macaracuay, el conjunto con más habitantes de la zona, aseguróque muchos de los delincuentes que roban a los transeúntes entran al terreno para repartir el botín de lo asaltado, y luego huyen hacia la avenida Chacao, que colinda con el terreno.
Esa extensión de tierra y vegetación, repleta de desperdicios, está a un lado de unos galpones pertenecientes a la Cantv y sus dimensiones ocupan tres grandes parcelas, una de ellas propiedad de Invedin.
“Ese terreno ha sido nuestra gran preocupación”, afirmó Bejar. Refirió los continuos testimonios que ha recibido en Asomacaracuay sobre ladrones que ingresaban al terreno después de asaltar a la gente. Los vecinos se dispusieron a denunciar el caso ante el CORE 5 de Petare a principios de enero de este año. “Allí, de mala gana, nos atendieron y nos dijeron que enviarían a algunos guardias para chequear el terreno”.
Días después, guardias nacionales entraron al terreno por la avenida Yare y constataron que había restos de artículos robados, mientras agentes de la Polisucre rodeaban el área externa. “Había carteras y otros objetos”, señaló.
Los funcionaros puntualizaron que es una zona donde los antisociales vacían las carteras y bolsos que roban, se reparten los bienes y después se marchan hacia la avenida Chacao –donde hay otra entrada y salida del terreno– la cual desemboca en la avenida Principal de Macaracuay. Notificaron que no hay construcción alguna y solo lo usan de manera momentánea para distribuir lo robado y para cocinar.
Ante la situación, y con el creciente temor de que invadan el terreno debido a que anteriormente hubo un intento de invasión, los vecinos acudieron a la Alcaldía del Municipio Sucre. Allí, afirmó Bejar, no fueron atendidos. “En la alcaldía no hay directores en sus diferentes áreas porque no hay presupuesto para pagarles”, apuntó.
Un problema de todos. Andrés Chola, concejal del municipio Sucre, señaló que es preocupante lo que ocurre con ese terreno. Por ese problema y otros tantos de violencia e inseguridad que vive la jurisdicción, han intentado conversar con el nuevo director de Polisucre, Omar Márquez. “Hasta los momentos la reunión no se ha podido realizar y estamos aguardando poder hablar con el nuevo director de la policía”, dijo.
Chola explicó que en el municipio había un padrino por zona; es decir, un funcionario policial que se ocupaba de un sector en específico. No obstante, con el advenimiento de la nueva gestión en la alcaldía, ha recibido quejas de los vecinos del municipio sobre la eliminación de esa figura. Añadió que la nueva dirección de la alcaldía ha querido prescindir de módulos de la policía en el Centro Histórico de Petare y en la plaza Miranda frente al centro comercial Millenium.
El concejal indicó que en la noche policías nacionales y funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas instalan puntos de control en la avenida Principal de Macaracuay como parte del plan antisecuestro que implementó el ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, desde septiembre pasado.
El dato
José Gregorio Rodríguez, arquitecto y vecino de Macaracuay, tenía un proyecto para el terreno ubicado en la avenida Yare. A finales de 2007 presentó un plan para construir un centro para el desarrollo de las artes. Relató que fue presentado en una asamblea de ciudadanos y la Alcaldía de Sucre en la antigua gestión de José Vicente Rangel Ávalos, pero que por cuestiones de presupuesto y otros impedimentos no se pudo desarrollar. “Lo que se está padeciendo en estos momentos con ese terreno, lo hubiésemos evitado con el proyecto que no solo se enfocaría en vecinos de la urbanización, sino también de todo el municipio”, dijo.
Espacios públicos de confort
El arquitecto y residente de la urbanización Macaracuay, José Gregorio Rodríguez, enfatizó que los planes para crear espacios públicos de confort, donde los ciudadanos puedan disfrutar al aire libre, es uno de los aportes que se pueden generar para combatir la inseguridad. “El ser ciudadano implica que tú seas el constructor del espacio de confort. Es una cuestión de ciudadanía”. Indicó que la seguridad no solamente se obtiene por cuántos policías pueda haber en la calle, sino también en el empleo que se le den a las plazas, parques y cualquier sitio de esparcimiento donde se reúna una gran cantidad de personas. “Aunque actualmente los delincuentes no le prestan atención si hay mucha gente o no en determinado lugar, pueden evitarse muchos asaltos”, afirmó.
Abogó porque no haya más espacios ociosos, sin alumbrado público, y que se rescaten para ocuparlos y disfrutar de ellos. “El ciudadano debe aprender a ser comunitario”. Como ejemplo de ello se refirió al Metro de Caracas cuando fue construido. “Fue un proyecto que ayudaba no solo al transporte, sino además a la seguridad de sus usuarios”, recordó.